La Cámara de Diputados de la Nación, sancionó finalmente la nueva Ley de Software. La norma fue aprobada por el oficialismo más los aliados. Cambiemos ya había manifestado que no acompañaría la propuesta, debido a las modificaciones que hicieron en el Senado. El nuevo proyecto disminuye considerablemente los beneficios a las grandes empresas, mientras que los mantiene a las pequeñas y medianas.
La diputada Karina Banfi, vocera de la bancada opositora, manifestó su malestar por las modificaciones: “Hicieron una ley para zafar. Para que no les digan que están matando la que promovió su mentor Néstor Kirchner. No hablen de empresas grandes o chicas. ¡No mientan! Nosotros hablamos de un chico de 17 años que hace una aplicación, tiene 9 empleados y cotiza en Bolsa. Y es un soñador”.
Por su parte, Pablo Carro, vocero del oficialismo, destacó: “En 2019 el sector registró 461 mil empleados, en 2030 tendrá un millón. Y esperamos duplicar las exportaciones, que fueron de 6000 millones. Nadie se está yendo del país por esta ley. Eso es mentira”.
Cabe recordar que la primera ley de software se sancionó en el año 2004 y desde ese momento se han venido realizando modificaciones. La última en el gobierno de Mauricio Macri. La industria del software nacional es hoy en día, el tercer sector con más exportaciones e ingreso de divisas. A su vez, de ser un motor de empleo.
#AHORA ?️?| Debatimos las modificaciones de la Ley de #EconomíadelConocimiento en reunión conjunta de las comisiones de Comunicación e Informática y de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de @DiputadosAR
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— Pablo Carro (@PabloCarroOk) October 6, 2020
Las últimas actualizaciones
Alberto Fernández, luego de asumir, había considerado las modificación del macrismo como un “colador fiscal”. Esto se debe, a que permitía a empresas de cualquier rubro acogerse a los beneficios fiscales. Por ello, el ministro de desarrollo productivo Matías Kulfas se puso a la cabeza de actualizar la ley.
El proyecto de la nueva ley de software, fue aprobado en junio, pero en el Senado, desde el propio Frente de Todos, decidieron hacer importantes modificaciones. Según lo fundamentado desde la Cámara Alta, el proyecto seguía beneficiando a las grandes empresas.
Ante esto, los senadores decidieron segmentar de la reducción del impuesto a las Ganancias para la industria tecnológica: será de 60%, 40% y 20% según el tamaño de la compañía. A su vez, habrá un bono fiscal de 70%, que no será transferible ni servirá para pagar Ganancias. Este podrá subir a 80% si se toman mujeres; travestis, transexuales y transgénero.
Las compañías deben tener el 70% de sus ingresos procedente del rubro tecnológico y deberán exportar. Las que más facturen deberán invertir el 5% de la masa salarial en capacitación de sus empleados y/o destinatarios en general, las pymes el 2% y las mipymes 1%.
También habrá diferencias en el aporte obligatorio a investigación y desarrollo (3% para las grandes, 2% y 1% para medianas y chicas). Mientras que también para acceder a los beneficios deberán mantener los empleados por lo menos por un año.