Desde el comienzo de la segunda ola de Covid 19 en nuestro país, se vienen llevando adelante estudios genómicos para detectar las nuevas variantes. Concretamente, desde el Consorcio Argentino de Genómica de SARS-CoV2 dentro del Proyecto PAIS, explicaron donde circulan las nuevas cepas.
El primer distrito donde se detectó la cepa Manaos o variante P.1. fue en la ciudad de La Plata. Así y tras detectar que la persona infectada con esta cepa no había viajado a Brasil ni había tenido contacto estrecho con un viajante, se determinó que ya la circulación era comunitaria.
Actualmente, y según detallaron desde Proyecto PAIS, son unos 17 los municipios en los que circulan las variantes de coronavirus de Manaos, California y Gran Bretaña.
El mencionado Proyecto Argentino Interinstitucional de Genómica del coronavirus es una iniciativa del ministerio de Ciencia y Tecnología nacional. La misma se ocupa de evaluar muestras tomadas en todo el país y determinar a qué variante pertenecen.
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En el detallado de distritos afectados por las nuevas variantes, se encuentran; La Plata, Olavarría, Bolívar y La Matanza, Merlo, Ituzaingó, Hurlingham, Las Heras, Lobos y Mercedes. A los que se sumaron; Berazategui, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Lanús, Quilmes, Malvinas Argentinas y Moreno.
En La Plata, Olavarría, Bolívar y La Matanza se detectaron las variantes de Reino Unido o Británica y la de Manaos. Mientras que en el resto, solo la primera de estas.
Asimismo, en el municipio de Malvinas Argentinas se detectó la variante Río de Janeiro. Mientras que en Quilmes y Moreno también se observó la de California. Cabe remarcar que las muestras pertenecían a marzo, en todos los casos.
La peligrosidad
En cuanto a los cambios de las variantes con respecto a la primera cepa del coronavirus, cabe remarcar que la cepa de Manaos ha sido catalogada como la mutación más peligrosa.
Un estudio divulgado por investigadores del CADDE (Centro Brasileño-inglés para el Descubrimiento, Diagnóstico, Genómica y Epidemiología), sugiere que la variante brasileña es más transmisible, puede causar reinfección y la carga viral puede ser hasta diez veces mayor.
Mediante modelos matemáticos, cruzando datos genómicos y de mortalidad, el equipo de CADDE calcula que P.1. es entre 1,4 y 2,2 veces más transmisible que las cepas que lo precedieron.
Los científicos estiman además que, en parte de las personas que ya están infectadas con el SARS-CoV-2, entre el 25% y el 61%, la nueva variante puede eludir el sistema inmunológico y causar una nueva infección.
