En medio de las acaloradas discusiones entre el oficialismo y Juntos por el Cambio, el diputado Eduardo “Bali” Bucca intentó imponer una idea superadora, pero finalmente no prosperó. La polémica se desató ante la negativa del bloque Juntos por el Cambio, para debatir la reforma judicial y la jubilatoria de manera virtual. Por eso, un grupo de diputados se apersonó en el Congreso, donde ya estaban otros representantes que habían viajado desde las provincias.
Cristian Ritondo fue el primero en dar declaraciones a la prensa, “Al no contar con un protocolo consensuado y aprobado, vinimos al Congreso para sesionar de forma presencial”.
“Hay debates que no pueden darse desde la virtualidad. Nuestro lugar es el recinto y acá estamos para debatir”, afirmó.
Desde el oficialismo, en tanto, aseguraban que todo estaba listo para sesionar, y con los acuerdos cerrados. Sin embargo, un momento antes de comenzar, el bloque más duro de la oposición, se negó.
“Es cuanto menos raro. Tan raro es, que la reunión transcurría con absoluta normalidad. En un momento pidieron un cuarto intermedio y dijeron: ‘No podemos’, cuando ya estaba todo cerrado.
Pareciera que de golpe, de algún lugar lejano, vino una orden”, ironizó Sergio Massa en clara referencia a Mauricio Macri.
La idea de Bucca
En el momento en que las posturas parecían irreconciliables, el diputado justicialista, planteó la idea conciliadora. La misma apuntaba a un sistema de sesiones mixto, donde convivían las dos maneras, presencial y virtual.
Bucca, planteó la posibilidad de habilitar sesiones presenciales cuando Cambiemos lo pidiese, aunque debería ser en un lugar al aire libre y sin la obligación de asistir. Esto para no dejar de lado la cuestión sanitaria. De igual modo, los diputados podían optar por sesionar online y evitar problemas logísticos de traslado. Pero finalmente, la idea no prosperó.
Dialogué con cada uno de los líderes partidarios una y otra vez, nos acercarnos a un acuerdo para garantizar presencialidad en las sesiones. Finalmente una parte de Cambiemos NO quizo sesionar y condicionó a otros del propio interbloque que SÍ querían hacerlo. Así fue.
— Eduardo Bali Bucca (@BuccaBali) September 2, 2020
Los ánimos en las redes eran efervescentes y virulentos. Desde el ala opositora más dura ya hablaban de #golpedEstadok. A la vez que en el Congreso comenzaban a juntarse todos los diputados del PRO y la UCR, dispuestos a entrar al recinto a como dé lugar.
Tras el fracaso de la propuesta de Bucca, desde el oficialismo salieron a culpar a cambiemos por la negativa. “Se garantizaba la presencia del diputado que quiera estar y quien no podía venir por cuestiones de salud. Porque vive en Tierra del Fuego o porque quiere cumplir la cuarentena, sesionaba en forma remota, como se hace en todas las provincias”, explicó Sergio Massa.
Propuse que se garanticen las medidas necesarias para permitir la presencialidad de diputadas y diputados que lo requieran.
Propuesta que fué aceptada por la presidencia de la cámara.
Esto NO es así Mario? https://t.co/F3H0E8kMHe
— Eduardo Bali Bucca (@BuccaBali) September 2, 2020
A su vez, en Cambiemos afirmaron que ellos pedían condiciones estrictas para ausentarse como ser mayor de 60 años, embarazadas o incluidos en los grupos en riesgo según fueran definidos por el Ministerio de Salud. “Estaba todo encaminado pero Máximo no quiso dejarlo por escrito”, acusaron.
Por último, el propio “Bali” Bucca, intentó poner punto final a la polémica y ya de madrugada, pidió un cuarto intermedio, no votar las leyes del temario y volver a negociar este miércoles.