Estados Unidos presentó este domingo un plan para compartir 55 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus en todo el mundo. Se trata de la segunda parte del envío de 80 millones que había prometido la Casa Blanca a comienzos de mes. La mayoría de las dosis serán repartidas a través del mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Concretamente, a través de un comunicado la Casa Blanca explicó que 14 millones de las 41 millones de dosis que se repartirán a través del Covax (el 75% de este segundo tramo) serán destinados a países de América Latina y el Caribe. Entre estos figuran Brasil, Argentina, Colombia, Perú, Ecuador, Paraguay, Bolivia, Uruguay, Guatemala, El Salvador, Honduras, Haití, y otros.
El 25% restante (unas 14 millones de dosis) serán repartidas directamente por los Estados Unidos, bajo un criterio de “prioridad regional”. Categoría en la que fue incluida recientemente la Argentina y que comparte junto con Colombia, Panamá, República Dominicana, Costa Rica, y otros países del Caribe.
COVID-19 vaccines are free. Get vaccinated, folks.
— Joe Biden (@JoeBiden) June 10, 2021
Asimismo, el Gobierno de Joe Biden también confirmó que trabajará con los fabricantes estadounidenses para producir más vacunas. La idea es compartir con países de todo el mundo como parte de su diplomacia sanitaria. Asia (unas 16 millones), incluyendo India, y otra parte a los países africanos (unas 10 millones).
Sin embargo, todavía no hay detalles sobre plazos de entrega y cuáles serían las vacunas donadas.
El comunicado
En el documento publicado por la Casa Blanca, el gobierno de Estados Unidos detalla; “Nuestros objetivos son aumentar la cobertura mundial de vacunación COVID-19. Prepararnos para los aumentos repentinos y priorizar a los trabajadores de la salud y otras poblaciones vulnerables según los datos de salud pública y las mejores prácticas reconocidas”. A su vez, “ayudar a nuestros vecinos y otros países necesitados”.
“Y, como hemos dicho anteriormente, Estados Unidos no utilizará sus vacunas para obtener favores de otros países”, aclara.
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“Al igual que lo hemos hecho en nuestra respuesta nacional, avanzaremos lo más rápidamente posible, respetando los requisitos legales y reglamentarios de Estados Unidos y del país anfitrión, para facilitar el transporte seguro y protegido de las vacunas a través de las fronteras internacionales”.
Por último, el gobierno de Estados Unidos sostiene: “Las vacunas y cantidades específicas se determinarán y compartirán a medida que la administración trabaje a través de los parámetros logísticos, regulatorios y otros específicos de cada región y país”.