El ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, está llevando adelante un proceso de cambios en su gabinete. De cara a la etapa que viene, el juninense se empodera en puestos claves dentro de la cartera. Homogeneidad de criterios y afinidad en la gestión, los fundamentos de los cambios.
A casi un año de la asunción, las distintas áreas del Gobierno nacional comienzan a realizar balances. Este es el caso de Transporte, donde el ministro busca tomar las riendas sellando su impronta en el gabinete.
Enfocado en el escenario pos pandémico, Meoni decidió reemplazar al cordobés Gabriel Bermúdez, de la Subsecretaria de Transporte Automotor. Bermúdez, que supo ser ministro de Gobierno y Seguridad en la gestión De La Sota, al parecer, tuvo varios encontronazos con el ministro. En su lugar, nombraron a Marcos Farina, otro delasotista que llegó apadrinado por el senador nacional Carlos Caserio.
Otro cambio importante, se dio en la Secretaria de Articulación Interjurisdiccional. El área quedó vacante tras la renuncia del randazzista Felipe Rodríguez Laguens. Rápidamente, el hombre de Junín, nombro a la ex intendenta de General Lavalle, Marcela Passo. Una dirigente de extrema cercanía con el ministro y representante del massismo bonaerense.
A su vez, En la subsecretaria de Gestión Administrativa, Meoni designó al massista Carlos Vittor, que remplazará a Fabrizio Gomis. Vittor se desempeñó en el municipio de Tigre y fue titular en la Contaduría General de la Provincia durante el gobierno de María Eugenia Vidal. El tigrense, secundara al secretario de Planificación, Gastón Jacques.
Estamos dando los pasos en el camino de la #ReconstrucciónArgentina ❤️?? https://t.co/l8xRwmmbo0
— Marcela Passo (@passomarcela) October 20, 2020
Conflicto con los ómnibus y la UTA
Mientras la cartera de transporte se reacomoda, dos nuevos conflictos comienzan a dilucidarse. Por un lado, la regulación y unificación de protocolos sanitarios provinciales para transportes de larga distancia. Por el otro, la paritaria de choferes que no cierra y presiona al ministerio.
En cuanto a lo primero, el mayor inconveniente se da en CABA, donde las autoridades sanitarias y de transporte, anunciaron que muy probablemente exijan test PCR para ingresar a la ciudad. De ser así, complicaría a los ómnibus de larga distancia, puesto que la extensa mayoría de las provincias no lo exige y el protocolo para viajes no estaría unificado a nivel nacional.
Por último, la paritaria de los choferes de colectivos del interior sigue sin cerrarse y las negociaciones apuntan al ministerio. Ante la exigencia de aumentos salariales, las cámaras empresarias agrupadas en FATAP, aseguran que no podrán pagarlos a menos que se duplique el monto subsidiario de nación. Cuestión que Meoni descartó de plano, por lo que la resolución del conflicto se extenderá.