Desde la Argentina, se propone que en el tratado que se realiza desde el Mercosur haya un mayor equilibrio entre el acceso de bienes, donde Corea lleva la delantera, y el agrícola. Por este motivo, se insiste en las regulaciones sanitarias y fitosanitarias. De no lograr un acuerdo, la Argentina plantearía una clausula especial para que el país pueda sumarse en el intercambio de bienes posteriormente.
Asimismo, la delegación argentina tiene una postura firme respecto de la incorporación de reglamentación sobre plazos y procedimientos de modo de darle previsibilidad a los acuerdos.
El canciller Felipe Solá había sido explícito en la necesidad de que el Mercosur se fortalezca, como condición para avanzar en nuevas negociaciones internacionales.
Las razones de la salida del Mercosur
La delegación argentina planteó recientemente el cese de la participación en las negociaciones que el Mercosur llevaba adelante con Corea, Canadá, India y el Líbano. Las razones expuestas tenían que ver con que los acuerdos de libre comercio planteados con países que compiten con la industria local, sumados al contexto económico producto de la pandemia, resultaban perjudiciales para la producción local.
De esta manera, se abrieron posiciones encontradas con las delegaciones de Brasil, Paraguay y Uruguay. Jorge Name, secretario de Relaciones Económicas Internacionales, propuso entonces una negociación en dos tiempos. Esto es, que permita a la Argentina evaluar su posible posterior ingreso para no retrasar la postura mayoritaria en el bloque.
Previamente, el canciller Felipe Solá mantuvo una reunión vía teleconferencia con casi 30 entidades vinculadas al sector agroindustrial argentino, en donde expresó las razones para evaluar la propuesta. A su vez presentó algunos proyectos comerciales en curso con Canadá, Colombia, Centroamérica y Vietnam.
El objetivo que se había planteado la Cancillería se relaciona con recuperar la planificación del comercio exterior. Para trabajar los acuerdos con los sectores afectados para consensuar posturas respecto de su impacto económico.
En este sentido, el canciller firmó un acuerdo con Alberto Barbieri, rector de la UBA, con el objetivo de realizar mediciones del impacto socioeconómico. También se sugirió a los Estados parte que repliquen esta iniciativa de análisis e investigación de los acuerdos comerciales.
Las nuevas propuestas han sido bien recibidas por las delegaciones del Mercosur, que deberán dar respuesta durante la próxima reunión de Coordinadores Nacionales. La misma se llevará adelante el próximo martes 12 de mayo.
Ezequiel Casartelli
Director Desmiento - Licenciado en Ciencia Política • Máster en Análisis de la Opinión Pública, Encuestas, Medios de Comunicación y Nuevas Tecnologías • Diplomado en Comunicación Política • Especializado en Data Intelligence.